Más que un país de simulación es un país de conveniencia; se dice, se hacen y se actúa de acuerdo a los beneficios que pueda recibir la persona interesada. Intereses, y los económicos sino los sociales, los que cambias por favores que te benefician tanto que te ves en envuelto con personas que ni te agradan y para poder tratarles tienes que ponerte una masca y empezar a ser hipócrita, sonreír y convivir, pero no eres el único por todo lo que te rodea es falsedad.
Los medios de comunicación y personas que están en contacto en ellos, son unos de los principales portadores de mascaras sociales. Todos vemos por nuestro benefició y tratamos de sacar ventaja de lo que se pueda, sin importar si dañamos o afectamos a alguien.
Y en este tiempo que de elecciones los partidos se dicen y empiezan a mostrar lo ineficiente que son los otros partidos políticos; para que como electores votemos por ellos. Pero sea por quien votemos, en nosotros ven puros votos para llegar al poder, y de todas sus promesas que nos hacen a los electores.
Pero al final de cuentas no son los únicos porque nosotros, también mentimos y engáñanos en menos magnitud, pero al fin de cuentas es la misma acción. Pero estamos tan acostumbrados a mentir y a que nos mientan; que ya no sabemos cómo enfrentar la realdad.
Pues siempre se crean estrategias políticas para no hablar de temas que afectan a nuestro país; casos como: el de la niña Paulette, la influencia A H1N; por mencionar los casos más recientes; pero con anterioridad, el chupa cabras; pero estas cosas son temporales, pero tenemos otros distractores que son permanentes y que se practican en tiempo determinado como: los mundiales, las olimpiadas y el súper bowl.
No hay comentarios:
Publicar un comentario